En una solemne ceremonia celebrada en el edificio de la Logia Masónica de Temuco, voluntarios de diversas compañías de Bomberos de la provincia de Cautín fueron distinguidos con la medalla “Germán Tenderini y Vacca”, un reconocimiento que la Gran Logia de Chile otorga anualmente para honrar la abnegada labor de servicio público de los bomberos.
La tradicional ceremonia, que destaca los lazos históricos de hermandad entre la masonería y los bomberos, contó con la presencia de autoridades de ambas instituciones y familiares de los galardonados. Este año, la distinción recayó en seis destacados miembros de la institución bomberil, reconocidos por sus propios pares y superiores por su dilatada y desinteresada trayectoria.
Los homenajeados fueron el bombero honorario Pablo Claveríe Chacón, de la Segunda Compañía de Temuco; Armin Llanos López, oficial de los cuerpos de bomberos de Temuco y Nueva Imperial; el padre Jaime Villalobos Farrán, capellán de Bomberos de La Araucanía y miembro de la Tercera Compañía “Bomba Germania” de Temuco; Miguel Recabarren Soto, director honorario del Cuerpo de Bomberos de Temuco; Lidia Montanares Alarcón, del Cuerpo de Bomberos de Perquenco; y Luis Vega Mora, de Pitrufquén.
Gustavo Rocha, gran delegado del gran maestro de la Gran Logia de Chile para la jurisdicción Cautín, expresó que “La Gran Logia de Chile desde sus orígenes comparte principios y valores con Bomberos de Chile, por tanto esta mutua identidad de propósitos nos llama a destacar la trayectoria de dilectos bomberos y bomberas que entregan su trabajo al servicio desinteresado de la sociedad». Añadió que la medalla «Germán Tenderini y Vacca» fue instituida para «agradecer y destacar este afán humanitario del voluntarismo que tan bien le hace a nuestra sociedad”.
La medalla lleva el nombre de Germán Tenderini, bombero y masón que entregó su vida en el incendio del Teatro Municipal de Santiago el 8 de diciembre de 1870. Perteneciente a la Logia Justicia y Libertad, su legado de servicio y sacrificio es el que inspira esta distinción.
En representación de los homenajeados, Miguel Recabarren Soto, director honorario y miembro de la Cuarta Compañía de Temuco, recordó la figura de Tenderini como un «artista, bombero y comerciante italiano» que, tras ser condecorado en Italia por su labor voluntaria durante una epidemia de cólera. En Chile, se unió a la Compañía de Salvadores y Guardia de Propiedad del Cuerpo de Bomberos de Santiago, donde alcanzó el grado de teniente tercero.
Recabarren destacó que la muerte en acto de servicio de este mártir «dejó en relieve la trascendencia de algunos destacados masones chilenos, que con su trayectoria dejaron una senda del modelo de hombre de bien, destacado y comprometido con sus ideales de servicio a los demás y solidaridad».